Ya sea que el presupuesto para su aventura en Alaska le permita un hotel de lujo o un hotel económico, un motel o una posada, el abanico de opciones para pasar la noche en Alaska tiene algo para ofrecerle a cada persona. Alójese en un renombrado complejo de cuatro estrellas o en una posada en un lugar poco frecuentado; de cualquiera de las dos formas, seguro que disfrutará de sus noches en la Última Frontera.
Los hoteles en Alaska son como los de cualquier otro lugar en los Estados Unidos: la conveniencia es clave. Servicios tales como transporte, restaurantes, spas de salud, centros de negocios y piscinas pueden encontrarse en muchos de los establecimientos más grandes, mientras que los moteles y las posadas más pequeños ofrecen muchos de los mismos servicios con peculiaridades locales que no encontrará en ningún otro lado.
Las tarifas varían según la estación y quienes viajan en verano deben hacer reservaciones con mucha anticipación.